La república oligárquica – Los liberales
Pando abrió el ciclo de veintiún años de gobiernos liberales, con una mentalidad modernizadora que marcó una nueva preeminencia de la economía y de le geopolítica interna de Bolivia, estableciendo el liderazgo de La Paz que tendría vigencia a lo largo de todo el siglo XX.
En 1900 se produjo un hecho crucial para la economía boliviana, Simón I. Patiño descubrió en la mina La Salvadora (Llallagüa), la veta de estaño más rica del mundo, comenzaba así la era del estaño en el país.
Simultáneamente, los precios internacionales de la plata se derrumbaron y la minería boliviana de la plata colapsó, coincidiendo con el auge del estaño y los usos múltiples de este producto en el mundo.
En poco más de dos décadas los llamados barones del estaño Simón Patiño, Carlos Víctor Aramayo y Mauricio Hoschild, se convirtieron en un poder económico y político decisivo en el país.
La guerra del Acre
El descubrimiento del árbol de la goma y su explotación (Antonio Vaca Diez desde 1876), determinó un auge económico muy importante entre 1890 y 1920, al punto que en las primeras décadas del siglo fue el segundo ingreso mayor después de los minerales.
El éxito de la goma generó muy pronto problemas de límites en el norte en la frontera con Brasil. Los filibusteros, con el beneplácito del gobierno del Presidente brasileño Francisco Rodríguez Alves, pretendieron independizarse de Bolivia.
Con un alto sentido de responsabilidad Pando decidió combatirlos y con un destacamento se dirigió al ignoto norte, en un viaje que en si mismo era una verdadera odisea. En la zona de Cachuela Esperanza y Riberalta en el Beni, se alzaba el imperio de Nicolás Suárez, el Patiño de la goma, quien pertrechó la columna Porvenir y colaboró al gobierno.
La crisis bélica (1902-1903) con antecedentes en las expediciones de Muñoz, Lucio Pérez Velasco e Ismael Montes que tuvieron éxitos como el de Riosinho, Capueiro y Bagué, culminó cuando Brasil decidió intervenir en el conflicto, forzando al débil ejército de Pando a la negociación, pero las acciones del Presidente boliviano deben destacarse por sus éxitos militares y las dificultades que se vio obligado a superar en una expedición de meses desde los Andes hasta la amazonía.
En 1903 en Petrópolis (Brasil), ambos países firmaron un tratado por el que se cedía el territorio del Acre a cambio de una compensación económica de dos millones de libras esterlinas y un ferrocarril.